A ganarse la vida : Lavacarros

Cuando me cambié de casa , conocí muchas personas, incluyendo al que ahora considero mi mejor amigo (Marco) y a una ex-novia (los cuales son hermanos haha). El tiempo paso y pues yo me juntaba bastante con Marco, andabamos en nuestros debrayes de formar una banda, también nos adentramos a un mundo el cual nos llevo a la perdición monetaria: Magic. (Post aparte).

El caso es que necesitabamos dinero para poder conseguir más Magic, así que tuvimos la mejor idea que alguien puede tener para obtener dinero: trabajar. De ahi, surgieron las clásicas dudas de novatos:

-Güey, pero ¿Donde nos van a aceptar? - ¿Y si reprobamos en la escuela por andar trabajando? -¿Y si regresamos muy cansados para todavía hacer tareas? -¿Y si esta lejos?


Eramos como Don Ramón, buscábamos empleo esperando no encontrar.

Hasta que, en otro fugaz momento de genialidad, se nos ocurrió otra gran idea, basándonos en las siguientes situaciones:

*Queremos un empleo bien pagado
*Queremos un empleo donde nos acepten a los dos
*Queremos un empleo donde nadie nos diga que hacer (O en el mejor de los casos, ser nuestros propios jefes)
*Queremos un empleo donde no exista la hora de entrada ni de salida
*Queremos un empleo donde si nos cansamos, podamos tirar la hueva un rato y seguir trabajando

Así que después de darle largas al asunto, decidimos unirnos al grupo de microempresarios de nuestro país con un trabajo del cual mucha gente requiere servicios:

LAVACARROS

Ese trabajo cumplía perfecto con lo que pediamos, podiamos ganar "bien", trabajabamos los dos, no teniamos jefes, solo estaba la hora a la que nos quedabamos de ver y por supuesto, si nos cansabamos, dejabamos de lavar y regresabamos si es que no nos daba tanta hueva.

Fue tan divertido mientras duró, como buenos novatos llegamos a cobrar hasta $15.00 MXN por carro y nos metíamos unas buenas friegas ahi lavando. Podría sacar miles de anécdotas de ese trabajo, donde duramos casi 2 meses, pero, únicamente compartiré dos de las que más me acuerdo:

* Una vez lavamos el auto de una señora que llevaba prisa. Yo estaba todo débil y Marco siempre exprimía las franelas. Creo que fue el auto mas marrano que dejamos. Todavía cuando se fue, iba chorreando agua hahaha.

*Otra ocasión, nos aburrimos de lavar y nos metimos a casa de Marco a desayunar algo y a ver a tele un rato. No sé que cosa estúpida dijo Marco, que hizo que casi me ahogara con el cereal, y por consecuencia, hice un descagadero escupiendo todo el cereal y ensuciando todo. Quién iba a pensar que me convertiría en un lavador profesional años después......